Casting de Pareja.


Elegir una pareja es una de las decisiones más importantes que tomamos en la vida ya que no sólo impacta en nuestra felicidad y bienestar emocional, sino que también llega a tener un impacto significativo en nuestra vida cotidiana. 

¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE ELEGIR BIEN A NUESTRA PAREJA?

Aquí te lo explico:
La pareja puede: 
1. Ser una fuente importante de apoyo emocional. En los momentos difíciles, tener a alguien que nos comprenda y nos apoye puede hacer una gran diferencia. Una pareja comprensiva puede ayudarnos a manejar el estrés, a superar los desafíos y mantener una actitud positiva.
2. Influir en nuestro estilo de vida y en nuestras decisiones cotidianas, gustos. Desde las decisiones sobre la alimentación y el ejercicio hasta las decisiones financieras y de vivienda, estilo de vida. Nuestra pareja puede tener un impacto significativo en cómo vivimos nuestra vida diaria.
3. Ser un(a) compañer@ de crecimiento personal. Puede desafiarnos, inspirarnos y ayudarnos a crecer como individuos. A través de la relación, podemos aprender más sobre nosotros mismos, desarrollar nuevas habilidades y expandir nuestras perspectivas.
4. Puede contribuir a nuestro sentido de propósito y significado en la vida. Compartir metas y sueños con nuestra pareja puede enriquecer nuestra vida y darnos un sentido de dirección y propósito.
Y los puntos anteriores pueden suceder así o conducirme a sus opuestos, esto dependerá de las personas con las que nos relacionemos.

¿CÓMO HACEMOS LA ELECCIÓN DE PAREJA?

La elección de pareja no se da al azar o por “cúpido”, “el destino”. No, no nos salen en el huevito Kinder, en una rifa o en el juego de la feria. No, tampoco es que sea nuestro hilo rojo, que nos conocimos en vidas pasadas y/o a través de cualquier otra explicación popular. 
La elección de una pareja es un proceso complejo que implica una serie de factores.
 Factores Psicológicos 
Los mecanismos “conscientes” radican en el hecho de elegir a quien nos agrada por las cualidades que para nosotros son atractivas (afinidad en algún hobby, belleza…) y como algo “consciente” decimos; “me gusta porque es guap@, me gusta porque comparte mis gustos…” Esto, por si solo ya es atractivo porque es un espacio compartido en el que hay más probabilidades de afinidad y atracción. Entre éstos factores encontramos:

1. Atracción: La atracción física es uno de los primeros factores que intervienen en la elección de una pareja. Sin embargo, la atracción también puede ser emocional, intelectual o incluso espiritual.
2. Compatibilidad: Buscamos parejas que compartan nuestros valores, intereses y objetivos de vida. La compatibilidad en estas áreas puede conducir a relaciones más satisfactorias y duraderas. 
3. Autoestima: Nuestra autoestima puede influir en la elección de nuestra pareja. Las personas con alta autoestima tienden a buscar parejas que las valoren y respeten, mientras que las personas con baja autoestima pueden conformarse con menos.
Factores Neurológicos.
A la hora de elegir a nuestro compañer@ estos factores tienen mucho poder. Pensamos y sentimos “Me gusta él/ella porque es simpátic@, porque es generos@, porque es educad@, porque es detallista, porque me cuida” Hay personas que admiten: “No sé porque me gusta pero me vuelve loc@” y todo eso nos gusta de una manera especial y como un imán se establece una atracción muy difícil de definir.
Entre éstos factores vamos a encontrar:
1. Oxitocina: Esta hormona, a veces llamada "la hormona del amor", juega un papel crucial en la formación de vínculos afectivos. Se libera durante el contacto físico y las experiencias emocionalmente intensas, y puede fomentar sentimientos de amor y conexión.
2. Dopamina: Este neurotransmisor está asociado con el placer y la recompensa. Se libera durante las experiencias nuevas y emocionantes, y puede contribuir a los sentimientos de euforia y excitación que a menudo acompañan a las primeras etapas de una relación. 
3. Feromonas: Estas sustancias químicas, que se liberan a través de la piel, pueden influir en la atracción física. Aunque el papel exacto de las feromonas en la elección de la pareja en los humanos sigue siendo objeto de debate, algunas investigaciones sugieren que pueden jugar un papel en la atracción sexual.
Existen factores psicosociales que explican por qué se elige pareja sea para casarse, convivir y/o compartir.

 Nuestra elección de pareja nunca es casual sino causal. Elegimos sabiendo y sin saber y en esa elección los patrones conductuales y conocidos suelen repetirse a lo largo de nuestra vida. Lo cual quiere decir que tenemos tendencia a repetir determinada fijación por un tipo en concreto de persona según sea nuestra historia de vida y aprendizajes de casa. Es probable, que todas nuestras parejas hayan tenido algo en común o que tengamos siempre la tendencia a “fabricar” (revivir) el mismo tipo de vínculo en nuestras relaciones, ya que este me resulta conocido y familiar. 
Los factores psicológicos y neurológicos nos impulsan a hacer nuestro propio y único proceso de selección. 
Elegir a nuestra pareja es una decisión de gran importancia ya que llega a impactar, como ya lo mencioné, en muchos aspectos de nuestra vida cotidiana y nuestra elección de la misma es el reflejo de nuestro trabajo de crecimiento o de nuestra “enfermedad”. Por lo tanto, es crucial que tomemos esta decisión con cuidado, consciencia y consideración, es por eso que hay algo a lo que ya llamo un casting de pareja.

¿QUÉ ES EL CASTING DE PAREJA?

En el mundo del entretenimiento, el casting es un proceso crucial que puede hacer o deshacer una producción, una película, una novela, etc. si esto lo trasladamos a la vida real el casting de pareja se convierte en un aspecto esencial que puede determinar el éxito o el fracaso de una relación y el impacto de la misma sobre nuestras vidas. 
En pocas palabras es hacer la elección consciente de con quien queremos compartir nuestra vida, nuestro tiempo, nuestras ganas, nuestros afectos, nuestras emociones y nuestro cuerpo para elegir al mejor cómplice y el más adecuad@ posible.

¿POR QUÉ ES TAN IMPORTANTE EL CASTING DE PAREJA? 

Algunas creencias con las que salimos a buscar pareja son:
* La idea del amor romántico en donde el amor será el pilar que sostendrá la relación (y durará por siempre), con el amarl@ basta o sobra.
 * Mi pareja adivinará lo que yo quiero sin que se lo diga y me lo dará.
* El amor suficiente para una buena y satisfactoria relación sexual
* Cuando me case/cuando tenga un(a) compañer@ no voy a sufrir penas ni frustraciones, tendré a alguien que me rescate.
* Mi pareja debe hacerme feliz.
* Mi pareja y yo seremos inseparables, siempre estaremos juntos y lo compartiremos todo.
* El amor a primera vista existe.
* La persona “correcta” debe llenar todos los aspectos de mi vida.
Estas ideas y creencias son una de las principales fuentes de insatisfacción en la pareja. Antes de arriesgarnos ciegamente, deberíamos colocar el entusiasmo entre paréntesis por un momento. Una vez que hayamos descendido de la estratosfera y tomado nuestras dosis de realidad, comenzar a considerar ventajas y desventajas, pros y contras y tus expectativas más entrañables; trata de pensar de la cintura para arriba y no de la cintura para abajo. 
Con el amor no basta, tendríamos elegir pareja de una manera más “pensada” y consciente y menos visceral, esto nos ayudaría a poder filtrar de todo aquello que nos llega lo que más nos conviene para poder formar una relación de pareja duradera y sana a lo largo de la vida: Te deseo, me gustan muchas de tus cosas, pero todavía no sé si encajas en mi vida, aunque mi cuerpo y mi ser me impulsen desenfrenadamente hacia ti.
No podemos elegir si nos van a romper el corazón o no porque eso sucederá, ya que el precio por establecer vínculos afectivos cercanos e íntimos es el dolor de la perdida, así que asegúrate que la persona con quien decidas compartirte valga el dolor de la pérdida.

ASPECTOS IMPORTANTES A CONSIDERAR EN UNA ELECCIÓNDE PAREJA.

Un aspecto muy importante antes de elegir pareja es conocernos a nosotros mism@s e incluso disfrutar la soledad. El autoconocimiento permite reconocer qué puedes dar, compartir y negociar con tu pareja y qué NO puedes negociar, dar y que no estas dispuest@ a tolerar.
Preguntas que, también, podríamos hacernos: ¿Esta persona me hace bien?, ¿Puedo ser yo sin temor a ser lastimad@?, ¿Me gusta la persona que soy cuando estoy con él/ella?,¿Tiene gustos a fines con los míos?, ¿Compartimos valores?, ¿Valida mis emociones?, ¿Me siento segur@?, ¿Me abre más puertas de las que me cierra?, ¿Me motiva, inspira a ser mi mejor versión?, ¿Sabe resolver problemas?, ¿Qué tan responsable es de si mism@? 

La elección de pareja no es garantía de que no habrá diferencias. Si partimos de la idea que mientras mayor conciencia y auto conocimiento tenemos, hemos elegido un compañer@ razonablemente adecuad@, aun así hay un sinnúmero de fuentes potenciales de roces, problemas y/ó conflictos.

Comments

Popular posts from this blog

La resiliencia (¡que palabrita!): El Arte de Sobrevivir y Prosperar Frente a la Adversidad

Los límites de la empatía

Bienvenid@!!